Desde la primera copa de vino que hemos pedido la atención fue increíble, con tapas acordes en cantidad y calidad.
La accesibilidad es perfecta, con rampa en la entrada y un recorrido llano a lo largo de toda la sala sin cambios de altura. Sin embargo, puede ser más complicado el paso si el lugar está muy lleno.
Las tapas de pescado y marisco son de buena calidad, especialmente si se visita entre semana, ya que la calidad y cantidad suelen ser mayores al estar menos saturado. El precio de las raciones y bebidas está en la media de la ciudad.
El servicio es bastante rápido, aunque a veces hacen claras distinciones entre clientes. Es importante tener en cuenta este detalle al visitar el lugar.
Sí, lo recomendaría al 100% para aquellos que buscan un buen tapeo. El trato, la calidad de las tapas y la atención hacen de este lugar una excelente opción para disfrutar de una experiencia gastronómica agradable.